El proceso

El proceso de despacho aduanero es tardado y comienza con la liberación de las guías de cada uno de los embarques que llegan. Aquí, los encargados de las aduanas revisan los documentos que indican el lugar de origen, la empresa que envía tus productos, qué tipo de artículos son, el peso y todos los demás detalles importantes sobre tu cargamento.

Ya que se hizo la lectura de la documentación, procederán a checar físicamente la mercancía. Esta inspección la realizan para verificar que lo declarado en los archivos corresponda a la cantidad y las características de tus productos.

Lo siguiente será la elaboración del pedimento con toda la información de los productos importados, así como los impuestos que tendrás que pagar por ellos. Una vez que los hayas saldado, podrás pedir la solicitud de mercancía, donde se realizará una última revisión antes de ser liberados.

La revisión

Durante la revisión de los productos en el despacho aduanero, las autoridades identificaran las irregularidades que tu mercancía podría tener. Estos chequeos se realizan de forma aleatoria por los verificadores; ellos pedirán la descarga de cada artículo para asegurarse que correspondan a lo declarado en la documentación.

En caso de que lo que importaste no cumpla con todas las regulaciones y las restricciones no arancelarias, este será devuelto. También, si no has realizado los pagos de impuestos correspondientes, también será detenido por las autoridades.

Si el material que te llegará sea algún producto químico, textiles o similares, el personal de la aduana tomará una muestra para revisar que se encuentre de la reglamentación permitida en el país y no sea peligroso su ingreso, punto que también retrasaría la llegada de tu mercancía.

Las irregularidades

Durante el despacho aduanero, la mayoría de las mercancías que pasan son aceptadas luego de su exhaustiva revisión; sin embargo, podría ocurrir que la tuya sea detenida. Las autoridades se valdrán de todo equipo tecnológico, sistema, servicio de inspección para asegurarse de que los artículos sean los declarados.

En caso de identificar algún problema con tu embarque este será detenido, en la Aduana, levantarán un acta sobre lo ocurrido en donde especificarán cual es la irregularidad presente. Estas podrán ser graves o simples:

Graves

Si tus productos resultan tener irregularidades graves, estos serán resguardados hasta que los soluciones personalmente y es un trámite muy tardado que te hará perder mucho tiempo hasta que puedas liberar tu material. Estas pueden ser:

• • • Que no hayas cumplido con la regulación nacional o que no tengas las restricciones no arancelarias.
    • Que dentro de tu mercancía se encuentren productos no declarados en la documentación.
    • Que datos como el domicilio o el nombre de tu proveedor en el extranjero sean falsos o que este no exista.
    • Que mientas en el valor de tus productos, sobre todo si indicas que sea de menos del 50 por ciento en cargamentos similares.

• Simples

Las irregularidades simples son más sencillas de solventar y no detienen por mucho tiempo tu mercancía. Aunque si te ganarás una multa por no tener tus importaciones en orden, como lo indica la ley. Estas son:

• Que haya errores en la fecha de llegada de tus productos al país.
• Que existan fallas en alguna de las claves de identificador de la mercancía.
• Que esté mal la clave del país de procedencia.